Reflexiones del Rector con motivo de la Fiesta de la Virgen de Caacupé

En sus reflexiones por los festejos en honor a la Virgen de los Milagros de Caacupé, el Pbro. Dr. Narciso Velázquez Ferreira, rector de la Universidad Católica, hizo hincapié a las distintas realidades que atraviesan los jóvenes en Paraguay, al tiempo de poner en consideración la responsabilidad del Estado con este sector. Asimismo, se refirió al compromiso la Iglesia y de los egresados de la UC para mejorar la situación socio-económica del país, desde sus posiciones.

¿Qué significa hoy Caacupé para los paraguayos?
“Caacupé se ha convertido, desde hace un buen tiempo, seguramente, a partir del Concilio Vaticano II, como el lugar, desde donde la Iglesia en el Paraguay, da una voz, manifiesta su plan de pastoral y su compromiso con el Paraguay, desde la inspiración que le confiere la Palabra de Dios para entender cuál es el horizonte que tiene el país y como también ella se compromete con esa realidad”, respondió el Pbro. Dr. Narciso Velázquez Ferreira, al ser consultado por el periodista Carlos Martini, en una entrevista para Radio Cáritas.

Relación Iglesia- Joven en Paraguay
En el marco del Trienio de la Juventud (2017–2019), que es el tiempo que la Iglesia en Paraguay dedica al trabajo con y para los jóvenes la nueva Evangelización, acompañándolos para que tomen un mayor protagonismo, el Padre Narciso expresó: “Teniendo en cuenta la realidad demográfica privilegiada, al ser un país mayoritariamente joven, la Iglesia ha declarado el Trienio de la Juventud. El joven de por sí tiene energía, es audaz, valiente, tiene toda la posibilidad de ir tomando posiciones dentro de la estructura que tiene una sociedad y, a partir de allí, marcar su orientación”.

Políticas públicas para los jóvenes
“Lastimosamente, en nuestro país, descubrimos que hay un espacio que está abandonado: los jóvenes que no estudian ni trabajan. Muchos de ellos, no han sido sostenidos adecuadamente dentro de su proceso de crecimiento, y por eso, hoy tenemos muchos jóvenes que están lastimosamente ociosos, en el real sentido de la palabra, porque no tienen posibilidades”, el Rector hizo una radiografía de la realidad nacional.
Y continuó diciendo: “Muchos jóvenes han tenido que abandonar sus estudios, o conformarse con un trabajo, con pequeñas actividades como para sobrevivir, que, desde la perspectiva esperanzadora, están bastante disminuidos. Es una situación alarmante porque la persona que no estudia, que no trabaja; sin embargo, necesita vivir, y la perspectiva de vida que tiene, es, seguramente, bastante pobre y, eso definitivamente, está rozando con la dignidad humana, situación que desde todo punto de vista no puede seguir así. Es una constatación que no puede dejar indiferente a nadie, en primer lugar al Estado”.
Frente a esta realidad, el Padre Narciso expresó. “Por tanto, la urgencia de la tarea y el compromiso que tiene principalmente el Estado -como gestor y administrador de todos los recursos y posibilidades-, debe plantearse, cómo realizar un programa a corto, mediano y largo plazo. Obviar esta realidad y no realizar estos programas es abandonar la nave a la deriva”.
Al mismo tiempo, el Rector, Padre Narciso Velázquez también señaló que gracias a Dios hay también otro sector de la juventud que está haciendo militancia en distintos órdenes, en distintos órganos y, sobre todo, que tiene la posibilidad de acceder a los ámbitos deformación terciaria y/o universitaria. “La gran tarea, justamente, es que estos jóvenes que tienen estas capacidades y posibilidades, privilegiada por cierto, vinculen a los demás jóvenes, para que juntos vayan construyendo el Paraguay que deseamos y nos merecemos”.

Egresados de la UC: Agentes de cambio
La Universidad Católica, como institución nacida en el corazón de la Iglesia, se compromete con la formación de profesionales íntegros para liderar toda suerte de cambio en la sociedad: “Desde las aulas, tenemos la responsabilidad de trasmitir los conceptos y valores que constituyen a la persona: la inteligencia, la voluntad, la libertad y la capacidad de amar”.
Ante los desafíos profesionales y sociales, el Rector dijo que “No basta con ser profesional, también hay un modo de ser profesional”.