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En la huella del buen pastor
Identidad

En la huella del buen pastor

La figura de buen Pastor con la cual Jesús se identifica puede ayudarnos a descubrir rasgos poco explorados de nuestra vocación catequística.

Para un pueblo acostumbrado a la vida rural, como era el israelita, la imagen del pastor se asociaba fácilmente a una serie de tareas, rutinas, preocupaciones y cuidados propios de su oficio. La cotidianeidad del ejemplo que señalaba Jesús permitía reconocer de inmediato las situaciones que la comparación sugería.

Andando por el país he tenido la suerte de poder contemplar pastores cuidando sus majaditas… Tanto en la Puna, al norte argentino, como en la estepa patagónica, al sur, la reflexión de la Biblia conjugada con la vida me fue enseñando y descubriendo el gran tesoro de esta comparación que Jesús utiliza darse a conocer.

Creo que como catequistas tenemos mucho que andar en la huella del Buen Pastor.

El Buen Pastor, Jn. 10, 1-42

Es recomendable leer el capítulo entero, pues a las palabras de Jesús, Juan opone la reacción de los judíos.

1) Ir leyendo el evangelio y anotar las actitudes de buen pastor que Jesús propone.

2) Para cada actitud recordar situaciones de la vida de Jesús donde podamos apreciar cómo la vivió él de manera concreta.

3) Relacionar cada actitud con nuestra práctica de catequistas, ¿cómo incorporar a nuestro ser catequista esta manera de ser de Jesús?

Te presentamos algunas actitudes para ir pensando:

El buen Pastor conoce sus ovejas

¿Conocemos la vida de nuestros catequizandos? ¿Compartimos sus alegrías, sus angustias, sus esperanzas, sus desalientos? ¿Sabemos lo que están viviendo las familias que tenemos a cargo? ¿Nos interesamos por sus situaciones de vida?

Las llama por su nombre

¿Tenemos un trato personal con nuestros catequizandos? ¿Buscamos llegar a su interioridad? ¿Somos portavoces para que el Señor llame a cada uno por su nombre a través nuestro?

Camina al frente de sus ovejas

¿Damos testimonio de lo que enseñamos? ¿Intentamos vivir lo que creemos? ¿Somos los primeros en cumplir lo que pedimos a los demás que cumplan? ¿Vivimos en forma coherente como para ir al frente y de frente?

Da la vida

¿Entregamos lo mejor de nosotros por los demás? ¿Buscamos donar los talentos que recibimos de Dios para beneficio de los otros?

Sus obras lo dan a conocer

¿Nuestras obras, nuestros gestos, nuestras actitudes de vida muestran a los demás lo que creemos y enseñamos? ¿Somos transparentes: los demás descubren y encuentran al Dios de la Vida a través de nuestra práctica?

¿Nuestra manera de estar con los demás… refleja y testimonia nuestra cercanía a Dios?

Para trabajar en grupos
Ser catequista, buen pastor – Salmo 23

Para reflexionar

– Leer en silencio el salmo.
– Elegir una frase y repetirla en voz alta.
– Comentar con el grupo por qué elegiste esa frase.
– A partir del salmo descubrir nuevas actitudes y características del catequista.

Para la puesta en común

– Sintetizar en un dibujo las características descubiertas
– Escribir entre todos el salmo como si hubiera sido escrito en nuestro tiempo, usando imágenes, situaciones y palabras de nuestra cultura

Salmo de los Animadores y Catequistas rurales de Humahuaca.

El Señor es mi pastor

El Señor de la Vida es mi pastor,
nada me hace faltar
en mi vida de cada día
debajo de los sauces
me hace descansar.

A las aguadas de los cerros me lleva
y allí alienta mi espíritu.
Por el camino de la vida me guía
por el gran amor que nos tiene.

Aunque pase por barrancos peligrosos
no tengo ningún miedo
porque sé que tú eres mi compañero
con tu honda y con tu ávio
al verlos voy seguro.

Un almuercito has preparado para ní
frente a mis egoísmos y rencores
con la yareta perfumas mi vida.

Junto a mí está tu alegría y tu compartir
hasta que yo me muera.
La pachamama es la casa de Dios
es la que va junto a nosotros.

Adaptación del salmo realizada por los animadores y catequistas rurales de la Prelatura de Humahuaca en el Taller de Formación para catequistas (junio 2000).

Vocabulario:

  • ávio: pequeño bolso, del tipo de los morrales, que llevan los pastores de la Puna con su viandita para pasar el día en los cerros.
  • yareta: planta perfumada de la Puna.
  • pachamama: la madre tierra.

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